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Guía Turístico en Córdoba

¡Hola! Hallo! Ciao!

«Hola, soy Nuria y voy a ser tu guía en esta maravillosa ruta»

Así empiezo todas las visitas que realizo a Córdoba y en todas trato de que la palabra «maravillosa» se quede en tu memoria después de haberla realizado.

Te voy a contar algo más sobre mí, porque siempre he pensado que quiénes somos es la mejor manera de entender por qué hacemos lo que hacemos y, por supuesto, cómo lo hacemos.

Me gusta decir que soy una cordobesa de pura cepa pero que vine de muy al norte, de padre español y madre suiza. Llegué a Córdoba siendo aún niña, siempre me sentí muy de aquí, pero con raíces de allí.

Me licencié en filosofía y soy una gran amante de la historia y de las historias de Córdoba, disfruto conversando y me encanta la cultura… Quizás por todo ello me dedico a enseñar mi ciudad con mi particular estilo, el único que tengo, el mío.

Cuando paseo por la mezquita catedral o por las calles de la judería con quien la visita por primera vez, intento verla con sus ojos y que la vea con los míos, con ese cariño y sensibilidad especial que me despierta.

Soy una apasionada de mi trabajo y por eso siempre intento que cada visitante se lleve lo mejor de mí. Trataré de ser una mano amiga para que tú y los tuyos podáis descubrir más de Córdoba

Un idioma es más que una serie de palabras, es una cultura y una manera de entender el mundo, por eso regreso cada vez que puedo a Suiza, para seguir llenándome de sus culturas y lograr enriquecer más la comunicación que voy a establecer contigo. Eso sí, siempre con mi acento y mi sonrisa, que espero que nunca dejen de acompañarme.

GRACIAS A ELLOS…

Porque una buena imagen te llena, te transmite y te emociona… He tratado de hacerte llegar las mejores imágenes de Córdoba que podría desear, de la mano de quien siempre está dispuesto a acompañarme por las calles, a fotografiar un nuevo detalle, o un rincón… mi padre, Carlos Diéguez. Así que si las imágenes que ves en esta web te han gustado (y estoy segura de que así es), es gracias a él.

Pocas cosas se pueden hacer en la vida si uno está completamente solo. Por esto podría agradecer a muchas personas, sin terminar nunca. Aquí quiero mencionar a Bárbara, mi madre, que ha dedicado una cantidad infinita de su tiempo, su paciencia y me ha dado toda su elegancia. Invisible pero siempre en mi camino. Y cómo no… gracias a la familia, amigos y algunos locos geniales 😉

Espero que esto te haya servido para conocerme algo mejor y entender mi manera de enseñarte Córdoba, así que si te apetece que paseemos juntos por la ciudad, vengas en pareja, en familia o en grupo, haré que os llevéis las mejores sensaciones de mi ciudad.